martes, 9 de julio de 2013

Para los que están aquí, o algún día estuvieron.

Si en algún momento sabes que me has sacado una sonrisa, has estado a mi lado siempre que te he necesitado, me has apoyado, defendido, y/o ayudado, continúa leyendo, esto va para ti y para las personas como tú:

No sé si yo importo a muchas o a pocas personas, ni siquiera sé exactamente a quién importo; pero hoy quiero escribir para los que sienten y me hacen sentir que yo ocupo un lugar, ya sea pequeño o grande, en algún rincón de sus corazones. Quiero agradecer a todos los que han estado a mi lado, a los que un día estuvieron y a los que aún continúan aquí. Gracias, no solamente a los que me han hecho sonreír cada día, sino también a los que me hicieron sonreír, al menos, una vez.

Aprecio a toda persona que me ha dibujado una sonrisa; a las que me hacen sonreír, no únicamente en las buenas, sino también en las malas. Gracias a los que me han ayudado a crecer como persona, a los que me han hecho aprender, a los que me han ofrecido su mano cuando me han visto caer, a los que se han acercado a mí cuando vieron que no estaba bien, a los que pusieron su hombro y me hicieron sonreír mientras lloraba, a los que me han secado las lágrimas... Gracias.

Si te sientes identificado con alguna de mis palabras, si sabes con certeza que un día estuviste aquí, o que todavía no te has ido; si sabes que tú eres una de las personas a las que les he dado las gracias, entérate también de que eres alguien enormemente grande para mí.

La vida no es fácil, pero es mucho más complicada cuando no se tiene a nadie. Y yo he tenido la suerte de tener siempre a gente a mi lado. Sean pocas o sean muchas las personas a las que yo les importe, para mí son suficientes; porque, gracias a ellas, sé que, cada vez que caiga, no careceré de manos para volver a levantar. Pienso que así, las caídas no dolerán, o dolerán mucho menos.

También quiero decir que, para todos los que estuvieron y están aquí, yo estoy y estaré siempre aquí. Y, a veces, sin saber por qué, también estoy para los que nunca han estado; pero tal vez tampoco esté tan mal ayudar a los que nunca me han ayudado a mí. Ayudar, sea a la persona que sea, me hace sentir bien.

En resumen, vuelvo a dar las gracias a todos ustedes, a los que permiten que yo ocupe algún lugar ahí adentro. Significan mucho en mí, ni se imaginan cuánto. Les debo una infinidad de sonrisas, la misma cantidad que me han sacado ustedes a mí. Una vez más, y para terminar, muchísimas gracias.

No hay comentarios:

Publicar un comentario